Bajo el lema "Una administración austera, eficiente y moderna", el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, ha participado hoy en unas jornadas de trabajo con representantes del sector de la administración pública para debatir sobre propuestas en torno a un objetivo: recomponer la maltrecha función pública andaluza. "Tenemos que reformar la administración al servicio del empleo y de los andaluces", ha dicho el presidente del PP andaluz, quien ha recordado que "nuestro Estatuto recoge como derecho la buena administración".
Para Arenas, "la administración tiene que convertirse en sujeto activo en la batalla común contra el paro". Para ello, es imprescindible "adoptar la austeridad como regla de oro de su funcionamiento; eliminar el exceso de burocracia; y suprimir las duplicidades y atajos que han permitido tantos abusos"
El presidente del PP andaluz consideró "fundamental" que los funcionarios "sean el pilar básico de la administración" y que ésta "ofrezca servicios de calidad y moleste lo mínimo al ciudadano" para que acudan a ella "con confianza" y no "con reparo y temor". Para ello, dijo que hay que "volver al derecho administrativo".
"No sobran funcionarios. Sobran duplicidades y políticos para controlar a los funcionarios", dijo Arenas, quien lamentó además que "en los últimos 30 años haya crecido la politización de la administración".
"Tenemos que hacer que dentro de unos años nadie reconozca la administración por su avance hacia la modernidad y la calidad", prosiguió. Para el presidente del PP andaluz "uno de los grandes retos es racionalizar un sector público que nos cuesta 5.000 millones de euros y que ha sido una "herramienta de poder". Así, recordó la "rebelión" protagonizada por los funcionarios de la administración ante los 'decretazos' de Griñán, "un auténtico ataque a la línea de flotación de la administración".
Javier Arenas prometió que con el gobierno del cambio "no se gastará ni un solo euro sin la firma de un funcionario" para garantizar el control de los fondos públicos, y adelantó algunas de las propuestas del PP en Administración pública, como las "licencias Express", para agilizar los trámites de creación de empresas a 24 horas; o la concentración de procedimientos y centralización de funciones en la propia administración, para contratar o adjudicar.
Entre las apuestas que destacó el presidente del PP andaluz para reformas la administración pública, Arenas destacó la reducción del número de consejerías y de delegaciones provinciales; la disminución del número de altos cargos y el personal de confianza; el nombramiento de los directores generales y secretarios generales técnicos entre los funcionarios de carrera; la aprobación de una Nueva Ley de Hacienda Pública para que ni un euro público se gaste sin control de los funcionarios; o la derogación de los 'decretazos', que supone el mayor ataque a una administración profesional.
Además, el PP hará una auditoría de las empresas públicas y reducirá el número de directivos de éstas, a lo que añadió la puesta en marcha de un Plan de Recorte del Gasto Corriente y una Ley de Transparencia, Buen Gobierno y Acceso a la Información Pública, "pensando en una administración honesta al servicio de los andaluces". Por último abogó po un Programa de Calidad de los Servicios para "garantizar la agilidad en la administración y acabar con los abusos burocráticos".
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